Acogimiento Familiar

Perspectiva de Trabajo

El Acogimiento familiar implica «brindar un espacio en familia a los niños, niñas y adolescentes que, por diferentes motivos, no puedan vivir con la suya, ofreciendo un entorno de contención afectiva que garantice la recomposición vincular con su familia y favorezca, desde un marco de respeto a su identidad, la resignificaciòn de su historia.

Familia de Acogimiento:

  • Brindamos información a los interesados en conocer la propuesta de recibir a un niño/a en acogimiento
  • Evaluamos la articulación de las posibilidades y necesidades del niño/a y su familia y la familia acogedora.
  • Realizamos un seguimiento de la situación del niño/a en la familia acogedora mientras dure el proceso.

Niño/a y su familia:

  • Analizamos cuáles son las reales necesidades del niño/a en relación al Acogimiento y lo/a acompañamos en la construcción de su espacio en la familia de acogimiento.
  • Velamos por garantizar el respeto de su historia y sus derechos.
  • Estamos atentos a su bienestar y desarrollo integral.
  • Acompañamos al niño/a en la relación con su familia.
  • Promovemos la recomposición del vínculo niño/a y su familia y la resignificaciòn de su historia

Preguntas Frecuentes

¿Qué es el acogimiento familiar?

Acogimiento familiar significa brindar un espacio en familia, por el tiempo que sea necesario, a niños, niñas y adolescentes que por diferentes circunstancias no pueden vivir con la propia, ofreciendo un entorno de contención afectiva que garantice la recomposición vincular con su familia y favorezca, desde un marco de respeto a su identidad, la resignificaciòn de su historia.

¿Quiénes participan en el proceso de Acogimiento Familiar?

En el Acogimiento familiar participan una familia de acogimiento, niño/a y su familia y/o referente afectivo.
Este encuentro entre una familia y/o referente afectivo que “no puede” por ahora, y otra, que pone a su disposición su familia solidariamente, es fundante en el Acogimiento Familiar. Por ello, las familias de acogimiento son “familias complementarias” que en ningún caso sustituyen a la del niño/a, no buscan reemplazarla, sino que colaboran con ella desde la reciprocidad.

¿Es lo mismo la Adopción que el Acogimiento Familiar?

Esta institución, en general instalada socialmente, es el encuentro entre una familia que busca un “hijo/a” y un niño/a que necesita “una familia”. La adopción es entonces la conformación de una nueva filiación. La palabra clave es OTRA.

¿Quiénes son los niños/as que pueden ser recibidos en Acogimiento Familiar?

Aquellos niños/as que por distintas circunstancias no puedan vivir transitoriamente con su familia.

¿Por cuánto tiempo estaremos con el niño/a?

La ley vigente establece un plazo de 180 días con posibilidad de ser renovados por otros 180 días. A pesar de esto, consideramos que dentro de los plazos estipulados sería importante trabajar para que las causas que dieron origen a la medida sean resueltas.

Requisitos para ser familia de acogimiento

  • Familias  con hijos/as  sean monoparentales, ensambladas, etc. ​
  • Ser mayores de 21 años.
  • No estar inscriptos en el Registro de Adopción ni tener voluntad adoptiva.
  • No tener antecedentes penales.
  • No tener denuncia por violencia familiar.
  • No ser deudores alimentarios.

Testimonios

Abel y Julia
Familia Acogedora

Simplemente queremos agradecer al Equipo de la fundación el habernos posibilitado tener la hermosa experiencia de recibir en Acogimiento a Valeria.

Luego de 4 meses de visitarla en el Hospital de Niños, acompañando sus avances y retrocesos, y compartir su lucha por la vida, celebramos el alta médica. Gracias al apoyo de ustedes y su voto de confianza hacia nosotros, Valeria se integró a nuestro hogar pudiendo experimentar una fuerte vivencia familiar.

Fueron casi 2 meses de abrazos, juegos, música, descubrimientos, aprendizajes, primeros baños, mimos, controles médicos, salidas al aire libre, y mucho amor! También se nos brindó la posibilidad de conocer a su familia, recibiéndolos en nuestra casa pudiendo compartir con ellos anécdotas y aprendizajes.

Estamos felices de haber sido para ella un nido transitorio compartiendo el amor de nuestros hijos, familiares y amigos….hasta su arribo al nido definitivo, donde podrá seguir repartiendo toda su ternura. Ojalá que muchas otras familias puedan vivir esta experiencia tan enriquecedora donde “todos ganan”. Que Dios nos acompañe siempre!

Joven que creció con una familia acogedora:

“Fue difícil, pero a medida que fui creciendo asumí mi situación: que tenia una familia propia y otra en la que fui creciendo. Y a las dos tenía que respetar…Aprendí a vivir en libertad. Mi experiencia como hijo acogido fue un aprendizaje, amar y creer.

Hoy tengo mi propia familia, soy un hombre muy feliz y comprendo la importancia de una familia para que un chico tenga todo lo que necesite.

Lo que hicieron por, hoy lo hago por mi propio hijo”.

Una familia de origen:

Surgió una luz de esperanza para el futuro de los dos.

Mi hija está contenida por el amor y calor de una familia que deseaba cuidarla, y con la seguridad y tranquilidad que mamá sigue estando allí, y pasado el mal momento volveremos a estar juntas, pero será distinto, ya no estaremos solas, habrá una familia más en nuestros corazones y seguramente los lazos que se formaron tanto con la niña como conmigo no podrán romperse más”.

Una familia acogedora:

“Sentimos que vale la pena.

Apoyar a una familia en dificultad, recibir un chiquito en acogimiento, es como prender una vela en un mar de oscuridad que, por más pequeña que sea, ilumina la vida de tantos otros y, a su vez, les da la posibilidad de prender otras pequeñas velas para que el mundo sea más claro, transparente y luminoso”.

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